Opinión: El gran reto de Perú, seguir como en el segundo tiempo
Opinión: El gran reto de Perú, seguir como en el segundo tiempo
Perú se va con la frente en alto, pero con una gran desazón: se jugó un pésimo primer tiempo , y no se aprovechó que nos encontramos con un Brasil demasiado errático en la salida. En el segundo tiempo la historia cambió y Perú jugó de igual a igual. El gol de ellos nació de una desconcentración. El fútbol es así, no perdona los errores.
El primer tiempo fue fatal para los de Ricardo Gareca. Se vio a un Perú desahuciado, ratoneando de manera poco inteligente. Si te quieres hundir atrás juega con un 5-3-2 para que el arquero haga pelear a los dos delanteros con balones largos. Gareca apuesta por un 5-4-1, para colmo el equipo no mandaba balones largos y Sergio Peña estuvo en su peor partido: prácticamente se jugó con 10 la primera mitad. Santiago Ormeño y Lapadula eran los baluartes si se quería defender los 90 minutos. Estos cambios de esquema demuestran algo más: la poca inteligencia y adaptabilidad táctica del futbolista peruano.
El segundo tiempo fue un partido distinto, se jugó de tú a tú a la selección brasileña y se aprovecharon sus errores en salida. El mediocampo se reactivó y se dio movilidad a los laterales. Hay futuro por las bandas, Carlos Lora y Marcos López dejaron buenas sensaciones y al parecer por primera vez en la historia del fútbol peruano tendremos laterales de recambio inmediato. Desde Percy Olivares y Jaime Duarte, no se recuerda estas sensaciones que se tienen de los laterales peruanos.
Perú no tiene que sentirse decepcionado, más bien agradecido con una copa que nos ha permitido descubrir nuevos talentos que pueden aportar, así como también aquellos que debemos descartar. Nos permitió reconfirmar la vitalidad de André Carrillo en la delantera peruana, él es el hombre del "chocolate" peruano, el hombre desequilibrante. Lo útil que puede ser Lapadula y el aporte que puede dar Ormeño.
Esta Copa América no nos volverá un equipo grande, pero si nos devolverá la ilusión que estaba muriendo tras las pésimas eliminatorias donde vamos últimos. Hoy demostramos que aún somos un equipo con deficiencias, que se confunde y paga sus errores. Pero a pesar de aquello, hemos demostrado que si somos capaces de revertir la situación. El reto es mantener el ritmo, este objetivo ha sido esquivo a la selección esperemos que ahora sí se pueda concretar.
Ver también: El penal que no le dieron a Perú contra Brasil
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