El increíble caso de Ferran Torres en el FC Barcelona

El increíble caso de Ferran Torres en el FC Barcelona

El increíble caso de Ferran Torres

Martes 9 May 2023
Carli Barraza
porCarli Barraza
Jefe de redacción de Bitbol

Cuando se habla de los peores fichajes en la historia del FC Barcelona, enseguida viene a la mente de casi todos los hinchas un trío ya histórico: Coutinho, Dembélé y Griezmann. Más de 450 millones de euros entre los tres para un rendimiento paupérrimo, todos durante la gestión de Bartomeu. Sin embargo, desde finales de 2021 un nuevo fichaje, ya en la segunda etapa de Laporta, viene pidiendo pista para ser "el peor fichaje" de todos: Ferran Torres.

Los tres mencionados anteriormente quedan como jugadorazos comparados con Ferran Torres. Nadie sabe qué le vieron en el Barcelona, pero ni bien Laporta se sacó de encima a Messi en agosto de 2021 argumentando que no había dinero, fueron a golpear a las puertas del Manchester City para llevarse a Ferran, convencidos de que Guardiola estaba desperdiciando una joya española. Y pagaron. Vaya si pagaron.

Un FC Barcelona "sin dinero" acordó pagar la suma de 55 millones de euros por Ferran Torres. Un extremo que hasta ese entonces había anotado apenas 25 goles en los anteriores cuatro años y medio entre el City y el Valencia CF, el club de donde surgió.

Ferran Torres en su presentación en el FC Barcelona. 

Ferran Torres en su presentación en el FC Barcelona. 

Un comienzo premonitorio

Llegó en diciembre de 2021 y debutó ya en el siguiente año con la camiseta blaugrana, en la Supercopa española "árabe". Metió un gol allí, uno más ya en la Copa del Rey y ya en febrero, en la Europa League le anotó al Napoli en la fase previa de octavos, aunque en ese partido ya empezó a evidenciar fallas. Falta de definición frente al arco y los nervios le jugaron una mala pasada al pobre de Ferran. Tal fue la situación que tras ese 1-1 de ida en la Europa League 2020-21, Ferran Torres se largó a llorar.

Él mismo estaba gritando a todo trapo que la camiseta le quedaba grande. Muy grande. Y por eso pese a esos goles auspiciosos, nunca más destacó. Metió un puñado de goles más en lo que restó de la temporada 2021-22, pero su juego dejaba mucho que desear. Eso sí, su "calidad" no estaba en duda. Con media temporada no era suficiente para saber si era bueno o no. Como si 30 partidos (los que jugó en media temporada) no fueran castigo suficiente para los que vemos al Barça cada fin de sean (ahora sin Messi).

Ferran Torres errando un penal contra su exclub, Valencia CF.

Ferran Torres errando un penal contra su exclub, Valencia CF.

Xavi no quiso decir nada sobre la calidad de Ferran, pero enseguida pidió un nuevo extremo, Raphinha, y exigió que se le renueve a Dembélé, mágicamente transformado en Garrincha. Y sumado Lewandowski, la nueva delantera del FC Barcelona estaba hecha. Y entonces el bueno de Ferran Torres empezó a desaparecer de cara al curso 2022-23. Casi como si hicieran el mismo camino con su compatriota Eric García, que casualmente también había llegado del City, tanto Ferran como el defensor lentamente, pero a paso firme, empezaron a calentar más el banco.

Hoy Ferran Torres es un suplente fijo en el Barça, incluso con Dembélé afuera por lesión desde enero de este 2023. Xavi será inexperto, pero algo sabe. No quiere correr riegos. A Ferran le queda el consuelo de poseer una nutrida hinchada catalana en Twitter, que lo sigue y alienta pese a que juega peor que mal en cada encuentro. El problema es que a la hora de venderlo, no se sabe quién pondrá los millones para llevárselo. Si es que aparece un interesado. Otro fichajazo "marca Barcelona". 

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