Asamoah Gyan es noticia y no por algún gol suyo. El delantero ghanés pasó de ser millonario a estar en una quiebra absoluta. Según informa el medio español AS, su entorno ha confirmado que solo tiene 600 libras en su cuenta bancaria y que se hace cuesta arriba mantener a su familia.
Hasta hace un tiempo, Gyan firmó con el Shanghai SIPG de China y alcanzó a ganar 250 mil dólares semanales. Él dejó el Sunderland cedido al Ain, de Emiratos Árabes Unidos, con el que marcó 123 goles en 120 partidos. Después, se fue a la liga china, donde jugó en el Shanghái SIPG y donde fue uno de los mejores pagos del mundo.
Hoy está en el Shabab de Dubai y hace meses que no cobra su salario. Sus problemas personales crecieron a raíz de los problemas financieros y tampoco puede comunicarse con su esposa y sus tres niños, desde agosto, por el mal estado que atraviesa mentalmente.