Martes 23 Oct 2018
En el Winning Eleven, Roberto Carlos era la figura principal. El brasileño era el mejor rematador de tiros libres, y por su velocidad, la mayoría de los que jugabán, lo ubicaban como delantero extremo.
1- Su pegada en tiros libres: potencia y dirección. Una zurda infalible.
2- Velocidad: 98 en valoración, el jugador más rápido del juego.
3- Doble función: Era defensor pero poniéndolo de delantero era imparable.
4- La primera adquisición de la Liga Master: Su crecimiento era más rápido que el del resto.
5- Físico: Incansable, la barra de 'estado físico' no bajaba nunca.