El Neroazzurro entendió que necesitaba un plus para ir por la negada Orejona de la última temporada. Ahora deberá demostrarlo en cancha.
La foto de la última conquista de Champions League de Inter de Milán ya queda un tanto vieja. Javier Zanetti alzó la prestigiosa Orejona en la temporada 2010, y desde allí, el certamen más importante de Europa le ha sido esquivo al equipo Neroazzurro.
Luego de la espina que dejó la derrota en la última edición contra Manchester City, los dirigentes entendieron que había que dar un plus para volver a pelear por el trofeo continental. Conscientes del necesario salto de calidad, cumplieron a rajatabla con todos los ítems que necesitaba el club y ahora esperan poder ver los resultados dentro del campo de juego.
Los primeros dos puntos a resolver eran la continuidad del entrenador Simone Inzaghi en el banco de suplentes y no perder a Lautaro Martínez, capitán y figura codiciado por todos. Asegurados goleador y técnico, el balance entre bajas y llegadas tenía que terminar dando en verde y así lo hizo, tanto en la caja de la tesorería como en los nombres del recambio.
Lautaro Martínez desechó una millonaria oferta de Arabia Saudita.
Sin dudas que la partida de Samir Handanovic será un vacío imposible de llenar. El último gran referente del vestuario colgó los guantes tras 455 partidos oficiales y a él se sumó también la importante transferencia de André Onana, su competidor en el puesto,por 52 millones a Manchester United. La pérdida de Milán Skriniar a PSG, el adiós de Edin Dzeko y la tentación de Marcelo Brozovic desde Arabia Saudita completaron el panorama de bajas sensibles.
Samir Handanovic colgó los guantes tras 455 partidos oficiales en el club.
Párrafo aparte para el gran Romelu Lukaku y su maniobra que solo él entendió. Era número puesto, quiso irse a Juventus y terminó en Roma, urgiéndose como un verdadero traidor por sus formas dentro de un plantel que lo apreciaba.
Romelu Lukaku tuvo una maniobra increíble.
La respuesta en los fichajes tenía que estar a la altura y el mercado de pases le deja una buena noticia al técnico del equipo. La tesorería desembolsó 30 millones de euros para contratar a Benjamin Pavard más la cintura que tuvo para dejarse a Marcus Thuram, uno de los grandes codiciados de este periodo de transferencias, le dan una inyección importante al equipo.
Para el vacío del arco, la elección fue el experimentado Yan Sommer, de excelente nivel en Basilea pero con un paso para el olvido en Bayern Múnich.
Marcos Thuram por Lukaku parecer ser un acierto. A esperar.
El retorno de Francia de Álexis Sánchez lo devuelve renovado y la apuesta de un ya veterano pero siempre desequilibrante Juan Cuadrado pueden darle más variantes en ofensiva.
Claro que su inicio furioso en Serie A invita a ilusionarse. Inter ganó 6 partidos de 7 (solo perdió con Sassuolo) con apenas tres tantos en contra. Ese registro de números positivos solo lo tienen Manchester City en Premier League y Bayer Leverkusen en Alemania contando las cinco grandes ligas europeas.
Claro que más allá del cabotaje, el verdadero objetivo es la Champions League. El empate inicial con Real Sociedad marca que no será un grupo para nada accesible porque además están Salzburgo y Benfica, dueños de las ligas de Austria y Portugal.
Con los deberes hechos, la tarea ahora para Inter será demostrarlo en la cancha. En el plano nacional, Milán y Nápoli asoman como serios rivales al Scudetto mientras que a nivel continental el abanico es más amplio. A demostrar.